domingo, 28 de noviembre de 2010

Benjamin - Tercer Lugar Compartido











A principio de la segunda guerra mundial, una importante familia alemana con herencia militar, gozaba del triunfo que se daba en aquel entonces. Todos excepto el hijo menor de apenas dieciocho años recién cumplidos, su nombre era Benjamín.
El joven no soportaba oír a su padre y a sus hermanos mayor hablar de lo benéfica que era la guerra y los sufrimientos y torturas que habían cometido contra los judíos.
Un día, Benjamín fue llevado por el general, su padre, a los campos de concentración donde se encontraban muchas familias judías, todas trabajando. Divisó todas las personas del lugar, pero le llamó la atención una joven mujer que tendría unos 17 años de edad, le pidió a su padre la empleara para limpiar las lujosas vajillas, ya que el trabajo que realizaba bajo esa indumentaria en el campo de concentración, era un desperdicio.
Los días pasaron y los jóvenes se enamoraron; cuando el general ni lo veía, se escapaban juntos al río y sentían que eran las personas más felices del mundo.
Una tarde de abril, la novia secreta de Benjamín, de nombre Belén, dejó una carta sobre la cama en la que dormía el joven diciendo.

28/04/1944

Querido Benjamín:
Anoche pasé una noche terrible. Ya no se manifiesta, pero lo siento a mi lado, espiándome, mirándome, dominándome con su presencia invisible y constante, lo siento pero debo confesarte mi secreto más grande. Tu padre nos ha descubierto, por lo que anoche fue una de las peores de mi vida, siendo mujer, imagino que sabes lo que han hecho conmigo. No pude decírtelo personalmente. Sin más pretextos.

                                                                                                  Te amo.
                                                                                                                 Belén.
Benjamín sintió más cosas de las que había sentido en su vida, su odio más grande al amor que tenía por Belén.
Tomó el arma de su padre, la buscó y la llevó.
Como algo inesperado puso a su padre contra la pared y le ordenó que le pidiera perdón  a la mujer. El general exclamo:
_ ¿Cómo te puedes rebajar por el amor de una despreciable mujer judía? ¡Si es así como se la puede llamar!
Benjamín acribilló a su padre y escapó con Belén.
Los hermanos mayores del joven, que habían sido sólo dos hombres de 24 y 21 años, persiguieron a los enamorados y los ejecutaron sin ninguna piedad.
Es así, como demuestran que el amor es más fuerte que el miedo.

FLORENCIA LÓPEZ