domingo, 28 de noviembre de 2010

La cueva de los espejos













Hace mucho tiempo un grupo de adolescentes, que creía que no le tenían miedo a nada, decidieron ir a la cueva de los espejos, donde la gente decía que pasaban cosas extrañas.
Los chicos se llamaban: Agustina, Nahuel, Valeria, Matías, Bárbara y Agustín.
Todos caminaron un largo rato hasta llegar al misterioso lugar. Allí se encontraron con una sorpresa,  había vampiros, velas y comida, todo estaba listo como para una cena.
Desde allí adentro, salían voces que decían, ¡váyanse!
Los chicos le hicieron caso. Mientras salían de la cueva encontraron marcas en las paredes, que tenían algo escrito, Agustín empezó a leer en voz baja y les dijo a sus amigos:
_¡Vámonos!
Todos los chicos empezaron a correr.
Fuera de la cueva, juraron no volver a entrar a lugares raros.

 MAITÉN ILARI